Hace ya unos meses, publicamos en el blog un post sobre los cuatro modos de recarga de vehículo eléctrico que hay actualmente. Si quieres leerlo, lo tienes disponible aquí.
Aquella información era muy reducida, por lo que hemos ido publicando diferentes posts dedicados a los tipos de carga para vehículos eléctricos. Así, podrás tener toda la información completa, saber cuándo debes utilizar cada uno de ellos, si se adapta a tu vehículo o no y, de esta manera, poder tomar mejor tus decisiones.
En el post de hoy, continuamos con el cuarto método de recarga: la carga rápida.
Si quieres, puedes leer el post dedicado al modo 1 de recarga Schuko o de corriente alterna aquí, del modo 2 de recarga lenta en este enlace y del modo 3 de carga semi-rápida aquí.
Modo 4: Carga rápida
Hemos visto cómo el modo 1 no es en absoluto recomendable para cargar un coche eléctrico. Por su parte, el modo 2 tampoco lo es mucho, mientras que los modos 3 y 4 son los métodos más idóneos para la recarga de nuestro coche eléctrico.
Mientras que el modo 3 es sin duda el modo más habitual de recarga doméstica, el modo 4 es un método también fiable y seguro, pero no se realiza en nuestra estación de recarga dentro de nuestra casa o garaje, sino que es el utilizado en las electrolineras.
El modo de recarga 4 se realiza con corriente continua (mientras que el resto lo hacen con corriente alterna). Los puntos de recarga del modo 4 no se recomiendan para viviendas particulares por su elevado precio y el alto coste de instalación.
Este modo es el más rápido de todos, con recargas mínimas de 50 kW y nos permite recargar un 70%-80% de la batería de nuestro coche en 30 minutos. También tienen potencia de recarga ultra-rápida hasta 350 kW. Nos permite recargar nuestro coche en un viaje largo y no tener que hacer una parada de varias horas para continuar la marcha.
Los conectores más habituales son el CHdeMO o el CCS Combo.
El modo 4 de recarga ultra-rápida no es aconsejable en el día a día. Si recargas habitualmente tu vehículo eléctrico de esta manera, la batería terminará dañándose.
¿Es recomendable este método de recarga?
Sí, pero no como método de recarga habitual. Ya hemos visto que es un modo muy rápido pensado para viajes o situaciones concretas en las que necesites con urgencia recargar tu coche de manera rápida y no puedas esperar a recargarlo por el método 3.
Sin embargo, abusar de este tipo de recarga o utilizarla como método de carga habitual conllevaría a un rápido desgaste de la batería de tu coche. Por ello, es un método rápido al que podemos y debemos acceder cuando lo necesitemos, pero sin utilizarlo de manera habitual.
Asegura tu propio punto de recarga
Si te animas a hacer una inversión e instalar tu punto de recarga eléctrico en tu casa o garaje comunitario, no querrás que sufra daños y te cueste más dinero aún arreglarlo o reponerlo. No te preocupes, tenemos la solución.
Nuestro seguro te cubrirá en los siguientes supuestos:
- Daños al cargador o al cable. Todos los daños al cargador y su cable están cubiertos, excepto los daños por agua/climatología.
- Daños por rotura o vandalismo. Tanto el cargador como el cable están protegidos ante daños causados por ataques vandálicos. Si te encuentras el cable cortado o el cargador roto por vandalismo, te cubriremos.
- Robo del cargador o el cable. En caso de que alguien te robe el cable o el cargador, el seguro también se hace responsable.
Puedes elegir entre una cobertura de 1.000€ o 2.000€. No lo pienses más y contrátalo ya desde 59,95€.