Se trata de un concepto reciente que quizá aún no conozcas, pero que en seguida lo vas a entender. Si siempre has ido a la gasolinera a repostar el combustible (gasolina o gasoil) para tu coche eléctrico, ahora existen electrolineras, donde podrás recargar tu vehículo eléctrico.
Las electrolineras son, por tanto, una estación de servicio que suministra la carga necesaria para que un vehículo eléctrico pueda continuar su viaje.
Cada vez vemos más electrolineras en autopistas o carreteras por las que transitan un alto número de vehículos.
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¿Cómo puedo cargar mi coche eléctrico en una electrolinera?
Igual que cuando vas a la gasolinera escoges qué tipo de combustible quieres para tu coche (según sea de gasolina o de gasoil), en las electrolineras deberás hacer algo parecido: escoger entre las diferentes potencias a la hora de recargar tu coche:
- Carga rápida. Permite cargar el 70% de la batería de tu vehículo en una media hora, ya que alcanza los 50 kWh. La carga se realiza en corriente continua.
- Carga semi-rápida. La carga se realiza en corriente alterna.
Ninguna de estas cargas es igual que la carga más lenta que utilizarías en tu propio punto de recarga en el garaje de tu casa, por ejemplo. La razón es obvia: las electrolineras necesitan que el vehículo se recargue lo más rápido posible para no generar colas. Además, como dijimos, estas electrolineras suelen encontrarse en autopistas y autovías, por lo que el propio conductor generalmente está en medio de un trayecto y tampoco le interesa estar varias horas esperando a que el vehículo se recargue. Por eso, la mayoría de los postes de carga de las electrolineras son de carga rápida.
Consejo: no utilices la carga rápida salvo casos excepcionales
Como ya os explicábamos en nuestro post anterior del blog, cuando hablábamos de la Duración de la batería de un coche eléctrico, cargar correctamente la batería hace que dure mucho más tiempo. Y dentro de esa carga correcta, nos referimos también a evitar, en la medida de lo posible, las cargas rápidas.
Está claro que, en un viaje o desplazamiento, probablemente no te queda más remedio que cargar tu coche eléctrico en una electrolinera mediante una carga rápida. No pasa nada por hacerlo de manera excepcional, pero si utilizases esas cargas rápidas de las electrolineras de manera habitual, la duración y salud de tu batería se resentirían.
Una vez más, la mejor opción es disponer de tu propio punto de recarga en tu casa o garaje y allí cargar tu coche o moto eléctrica cada noche siempre que lo necesites. Para ello, deberás hacer una inversión económica que puedes proteger con nuestro seguro para tu punto de recarga contra robo, daños por rotura o vandalismo. Elige entre 1.000€ y 2.000€ de cobertura. ¡Contrátalo ya! 100% online.
